El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha manifestado su repudio por el reciente escándalo de espionaje en el que el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) ha sido señalado por espiar a líderes independentistas catalanes, calificándolo como la “segunda parte de la operación Cataluña”. Aragonès ha expresado su indignación ante el contenido desclasificado de los autos del Tribunal Supremo, calificándolo de “afirmaciones fuera de la realidad y del sentido común”.

El líder catalán ha asegurado que su gobierno irá hasta el final para depurar responsabilidades en este escándalo y para proteger los derechos fundamentales de los ciudadanos. Aragonès ha expresado su convicción de que el espionaje del CNI tiene una intencionalidad política, con el objetivo de destruir un proyecto político legítimo que defiende la libertad de Cataluña.

Sin embargo, el ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, ha negado rotundamente cualquier vínculo entre el gobierno central y la infiltración con el programa de espionaje Pegasus. Bolaños ha subrayado que el caso Pegasus se produce en un contexto político en el que todavía hay negociaciones pendientes entre el Partido Socialista y los republicanos catalanes en materia de presupuestos, así como tensiones en el Ayuntamiento de Barcelona.

Este escándalo de espionaje ha generado una gran controversia en Cataluña y ha puesto en entredicho la confianza en las instituciones de seguridad del Estado. Mientras los líderes independentistas exigen transparencia y responsabilidades, el gobierno central ha reiterado su compromiso con el respeto a los derechos fundamentales y ha afirmado que investigará a fondo las acusaciones de espionaje.

En Over Karma continuaremos siguiendo de cerca este caso, informando sobre las últimas novedades y dando voz a las diferentes posturas de los actores involucrados. Manténgase informado en nuestro sitio web para tener una visión completa de este escándalo que ha sacudido la política catalana.